Estimados compañeros, mañana intento preparar una denuncia, a lo que ha constituido unos 4 años "mi (empleadora) empresa", dirigida a la Inspección del Trabajo. Es un examen durísimo y, a ver como salgo. Soy solo, una especie de David en contra de . . . no se cuantos Goliat. Comparto esto con vosotros, porque así acabo con sentirme solo.
Estimado lector.
Nací (y crecí). . . campesino.
Me quedaron grabados, en mi memoria. . . noches de susto, cuando mis padres, los vecinos, ponían las casas "de pie" dando alarma que algún zorro (o algún lobo) dio ataque a las" jaulas " ("de gallinas "o de " animales "), en algún corral.
A pesar de estos recuerdos, me inclino ante la Naturaleza, y no lo veo como una solución (de mi parte, como "hombre"), matar a algún bicho de esto, sólo para la culpa de actuar tal como la naturaleza misma, lo ha equipado a actuar.
La solución (desde mi punto de vista, "hoy en día" como "desde siempre") es. . . de tapar los "agujeros" de mi valla (de arreglarla) y si no la tengo, hacerme una.
De este modo, el bicho se va buscarse la vida por donde quiera y yo, busco la mía.
¿Por qué digo esto?
Porque hoy, o mañana (dependiendo de . . . cuando acabo de escribir la carta) voy a presentar una "queja", "propuesta", "sugerencia" (no sé cómo decírselo), porque aquí en España (donde vivo), esta carta (que intento escribir) se llama "denuncia", dirigida a la "Inspección de Trabajo y Seguridad Social".

Si alguien quiere leer más, añado aquí el enlace:

http://sites.google.com/site/obreroeuropeodeltransporte/chofer/usoprof/cp/taco/t-movil/zorro

D: Adrian Iordache