El sargento comenzó una discusión con los porteros del local al negarse a pagar la entrada enseñando su placa
Un sargento de la Guardia Civil ha sido sancionado por el Tribunal Supremo como autor de tres faltas de carácter grave después de que fuera a un club de alterne, cuando terminó su servicio, en su coche oficial y en estado de embriaguez. Canarias En Hora te recomienda
Cuatro coches hacen 'el trenecito' en el parquin de Las Arenas Fomento dispuesto a acabar la carretera de La Aldea Carla Suárez y Joel Rodríguez, Premios Telo 2016 El hombre acabó su jornada laboral y con el coche patrulla se fue al prostíbulo donde enseñó la placa para no tener que pagar. Tras negarle la entrada gratis, el agente comenzó a discutir con los porteros del local, por lo que el encargado llamó a la Guardia Civil y comunicó lo que estaba ocurriendo. Al poco tiempo se personó en el lugar una patrulla acompañados del jefe de la misma, que se acercó al sargento y le pidió que se identificara y se bajara del coche oficial. En un principio el hombre se negó y se comenzó a hacer comentarios despectivos hacia el Capitán. Cuando los agentes lo vieron se dieron cuenta de que había ingerido alcohol, no se mantenía erguido y balbuceaba.
Al agente se le considera responsable de "usas para fines propios medios de carácter oficial con grave perjuicio para la Administración" y "la embriaguez fuera de servicio cuando afecta a la imagen de la Benemérita".