Desde el comienzo de la semana, la gendarmería  francesa del condado (BSDEs), en colaboración con varios departamentos gubernamentales, han llevado a cabo una campaña de controles de vehículos de transporte: camiones, autobuses, furgonetas, taxis ...

El viernes por la tarde alrededor de las 17h, la policía detectó a un camión que circulaba por la RN10 en Roullet-Saint-Estèphe. El conductor, un empleado de una empresa de transporte francesa, un joven de treinta años, circulaba sin el cinturón de seguridad y en ese instante se observa que estaba haciendo una llamada mientras conducía.

Cuando la patrulla de motoristas de la gendarmería le detienen para realizar una inspección, han descubierto que conducía con 1,26 gramos de alcohol por litro de sangre, además la prueba en materia de drogas dio positivo . Él había consumido cocaína.

Trasladado a la comisaría para tomar declaración, fue puesto en libertad al llegar la noche. 

Se volvió a reunir cuando los servicios habian recibido los resultados de sus pruebas para detectar la cocaína consumida. Mientras tanto, al conductor se le fue retirada su licencia de conducir. La empresa para la cual trabajaba tuvo que enviar a otro conductor para hacerse cargo del vehículo de 38 toneladas.

El sábado, la policía de Angulema, y ​​el helicóptero RDHS Limoges dió por finalizada la operación conjunta de control en la RN141 y RN10. De 10:30 a 11:30 horas. Identificaron cinco  vehículos por exceso de velocidad, además de la violación de la prohibición de adelantar a los vehículos pesados.

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