El juicio con jurado contra el ertzaina acusado de matar de un disparo a un camionero con el que había tenido un altercado de tráfico en 2015 en la Autovía A-15, a la altura de Leitza, comenzará el próximo lunes en la Sección Primera de la Audiencia de Nafarroa.
Los hechos que ahora se juzgan tuvieron lugar el 4 de junio de 2015, cuando el acusado se dirigía desde su domicilio en la localidad navarra de Tiebas hacia su puesto de trabajo en la comisaría de la Ertzaintza de Tolosa (Gipuzkoa).
A la altura de Irurtzun, según recoge el Ministerio Fiscal en su escrito, coincidió en la A-15 con un camionero de 38 años con el que en algún momento inició una discusión por motivo de la circulación, cada uno en el interior de su vehículo.
Posteriormente, el camionero tomó la salida dirección Leitza para dirigirse a su destino cuando se percató de que el acusado le seguía, por lo que paró su vehículo, haciendo lo mismo el ertzaina.
En el momento en el que el conductor se bajó de su vehículo y se dirigió al acusado para pedirle explicaciones, «este cogió su arma, salió del coche y apuntó con dicha arma a la cabeza» de la víctima y «le disparó a menos de 50 centímetros de la cara». El Fiscal solicita 20 años de prisión por un delito de «asesinato» para el procesado.
La defensa, por su parte, sostiene que el acusado, ante la «actitud agresiva» del camionero y en la «creencia absoluta de que iba a ser agredido» sufrió «una perturbación anímica de temor incontrolable de que sus pulsaciones se elevaran y pudiera volver a padecer un nuevo infarto» por lo que con «ánimo exclusivo de defenderse y afectado por esas circunstancias» cogió su pistola y salió del vehículo.
Tras señalar que apuntó hacia «el ángulo muerto entre el hombro y la cabeza del camionero», añade que un momento determinado el arma «se disparó fortuitamente», impactando contra la víctima, lo que le ocasionó la muerte.
La defensa califica los hechos como constitutivos de un delito de «homicidio por imprudencia grave» con la concurrencia de las eximentes incompletas de anomalía o alteración psíquica, legítima defensa y miedo insuperable.
En la causa hay dos acusaciones particulares, una en representación de la pareja de la víctima, que reclama 18 años de prisión, y otra en defensa de los intereses de los padres y los dos hermanos del fallecido, que pide 25 años de cárcel.
La vista oral, que empezará el lunes a las 10.00 con la elección de los nueve miembros del jurado popular y los dos suplentes, se celebrará a lo largo de seis sesiones, señaladas entre el 17 y el 24 de octubre.