El problema de los camiones atrapados por causas del GPS, es en muchos casos por que las empresas obligan a coger rutas alternativas para evitar los peajes
No resulta extraño las noticias sobre camiones atrapados en las calles de pequeñas poblaciones o incluso en caminos forestales de cualquier país de Europa. En lo que llevamos de año más de media docena de camiones se han visto implicados en sucesos similares. Las pruebas más recientes de incidentes de este calibre las podemos encontrar en este lugar. Tan solo hace unos días, concretamente el día 15 de febrero otro camión se quedo atascado junto a la entrada del camping y la playa de la localidad a causa del gps. El camionero polaco se dejó guiar por las indicaciones del GPS y la ‘maquinita’ le acabó llevando por un camino sin salida, el que finaliza en el camping y la playa de la localidad de Vidiago.
También el día 13 de febrero publicamos que, un tráiler de Carrión quedó atrapado en una rotonda de Benigánim (valencia). El incidente ha ocurrido en la noche del día 11 de enero. Al parecer el conductor de Carrión se quedó atrapado en una pequeña rotonda del pueblo por causas aun no determinadas. Aunque todo apunta a que el suceso ha ocurrido por seguir los conductores fielmente las indicaciones del navegador.
También ese mismo día 4 de Febrero así terminó un camionero checo a causa del GPS Un conductor de camión maniobraba una mañana, en la antigua carretera Rottsieper: Al parecer debido a su "Navegador" le había enredado de esta manera.
Es un camino que bordea la montaña de Monteolivete y conecta la calle Notario Closells con la calle San Narciso. La causa fue la interpretación de la señal del GPS. El vehículo permaneció varado desde las 11,30 de la mañana hasta la 1 de la tarde.
Es una cuestión de ahorro de peajes, donde las empresas planifican las rutas más cortas y exigen tomarlas a los conductores. Se trata de trazar una línea recta entre el punto de partida y el punto de llegada, en el cual a veces los conductores se ven obligados a tomar varias carreteras comarcales.
Así que, a mi juicio, lo que les ha ocurrido a estos camioneros y les pasará a otros en el futuro tiene dos explicaciones: – Los peajes en ciertas carreteras llevan a muchas empresas a escoger otras rutas. Esto es probablemente inevitable. – En España y en Europa todavía hay carreteras que figuran en los mapas (y en los GPS) que no son dignas de ese nombre.