Los agentes de la Guardia Civil de Tráfico formularon 152 denuncias a transportistas por incumplimiento de los tiempos de conducción y de descanso, los excesos de peso, el transporte de mercancías peligrosas sin los debidos controles y el traslado de otro tipo de cargas sin autorización, así como por la manipulación de los tacógrafos para permitir circular más kilómetros y más tiempo, pero de manera irregular.

El marco normativo del transporte recogen multas que pueden llegar a 4.000 euros, en el caso de infracciones muy graves. Del total de las denuncias, 98 correspondían al ámbito del transporte y 54 estaban directamente relacionadas con la seguridad vial, entre las que destaca el chófer de un camión que dio positivo en drogas. Las unidades desplegadas ayer en el entorno del área metropolitana de Vigo realizaron 423 inspecciones, que se combinaron con la realización de pruebas de alcoholemia y drogas.

Fuentes de la Guardia Civil de Tráfico de Galicia explicaron que con este tipo de dispositivos se persigue evitar la competencia desleal y las prácticas fraudulentas en el sector del transporte, especialmente ante las fechas navideñas. Las mismas fuentes indicaron que el transporte por carretera no ha sido ajeno al descenso de la actividad debido a la crisis económica, por lo que «resulta obligatorio reforzar la lucha contra la economía sumergida y contra la competencia desleal en este sector». 

Son comportamientos «que distorsionan el mercado porque se efectúan de forma ajena a la normativa del transporte y que quiebran el principio de la libre competencia».