La reforma impulsada propone que reciban un mínimo de 677 euros al mes y no menos de 734 euros si son dos hermanos o más
El Congreso votará el próximo martes a favor de iniciar la tramitación y aprobación de la reforma legal que garantizará a todos los huérfanos de crímenes de violencia machista el cobro de una pensión con independencia de que la víctima, su madre, cumpliese o no con los requisitos que se exige para ello. Ángeles Álvarez, la diputada que defenderá la iniciativa del PSOE ante el pleno, dio ayer por seguro el respaldo a la toma en consideración de la proposición de ley por parte de Ciudadanos, Podemos y la mayor parte del Grupo Mixto, lo que ya garantiza una mayoría de la Cámara, pero es que además espera que también se sume el PP, porque «sería inconcebible que no lo apoyase».
LAS CLAVES
Requisito actual que se anularáPara cobrar la pensión, la víctima debe tener cotizados 15 años, trabajar o estar apuntada en el paro Soledad absoluta.Ni el Gobierno sabe el número de huérfanos que no reciben nada y viven al amparo de sus familiares La ley actual exige que para que un huérfano de violencia machista cobre una pensión la víctima debía trabajar o estar dada de alta como desempleada, o en su defecto tener al menos cotizados 15 años a la Seguridad Social. Son muchas la asesinadas que no cumplen estás condiciones y sus hijos se quedan sin ingreso alguno.
La situación de abandono público que sufren desde hace años estos huérfanos hace que el Gobierno ni siquiera sepa cuántos son los que no cobran pensión alguna y sobreviven gracias al amparo de sus familiares o de los servicios sociales si la familia no puede mantenerlos. Lo único seguro es que desde 2013 hasta hoy 169 menores se quedaron huérfanos por crímenes machistas -su padre permanece encarcelado-, lo que supone una media de 40 al año.
La propuesta socialista no solo prevé la universalización de la pensión, sino también un importante aumento de su baja cuantía. Propone que el niño desamparado reciba un 70% de los ingresos que tenía su madre -ahora es un 52%- y que si son dos o más hermanos huérfanos pasen a cobrar el 118% de los ingresos maternos -el equivalente a la pensión de una viuda con hijos-, cuando ahora estos menores reciben lo mismo sean uno o más. La reforma, de aprobarse en los términos del PSOE, supondría aumentar un 34% la pensión media de orfandad y más que duplicarla en los casos de varios hermanos. Las cuantías mínimas serían de 677 por niño y de 737 para dos o más vástagos.
Los huérfanos de violencia machista tendrían derecho al cobro de esta pensión hasta los 21 años, tope que se ampliaría hasta los 25 si no se han emancipado y la unidad familiar en la que conviven no alcanza el 75% del salario mínimo, e incluso algún año más si el benficiado aún estudia una carrera universitaria.
Petición de retroactividad
El PSOE, durante la tramitación de la ley, aspira a introducir una enmienda que convierta en retroactivas estas reformas, lo que permitiría conseguir una pensión a todos los huérfanos a los que se les denegó en el pasado por no cumplir los requisitos y, además, obtenerla con el aumento de cuantía establecido.
La reforma pretende establecer también otras dos medidas en beneficio de estos menores. Los huérfanos, con la ley actual, sólo cobran de entrada un 20% de los ingresos de la madre fallecida (la pensión ordinaria) y solo pasan al 52% cuando hay una sentencia firme que mantiene al padre homicida en la cárcel, cuando tienen derecho a una pensión absoluta. El cambio sería que, una vez se produzca la condena firme, reciban el cobro del 70% de la base reguladora desde la fecha en que les fue reconocida la pensión, aunque hayan pasado meses o incluso años.
La segunda novedad es que si el padre muere después de matar a la madre -normalmente por un suicidio- tengan derecho a compatibilizar el cobro de la pensión de orfandad de ambos progenitores, cosa que ahora se les niega. La remuneración sería el 70% de los ingresos de la madre y el 20% de los del padre.