La policía ha detenido en Albacete a tres personas, un matrimonio y su hijo, acusados de un presunto delito de estafa continuada contra el patrimonio y otro contra los derechos de los trabajadores. Los arrestados ofrecían puestos de trabajo a cambio de 2.000 euros.

Fue una denuncia a la policía la que dio la voz de alerta. En el mes de marzo una persona denunció haber recibido una rara propuesta de trabajo, tras ver una oferta de empleo en internet y acudir a una entrevista. En ese encuentro le pidieron 2.000 euros a cambio de un empleo. El candidato denunció la propuesta ante la policía.

A raíz de esa denuncia, la policía comprobó que en distintas páginas de búsqueda de empleo aparecían ofertas de trabajo en una residencia o centro de día para personas mayores con problemas de salud. Para trabajar allí había que realizar un curso de auxiliar geriátrico por el que había que pagar 1.450 euros.

La empresa que ofertaba los cursos pertenecía también a los detenidos, no tenía homologados los cursos y certificaciones y había sido denunciada hasta en 15 ocasiones cuando operaba en Guadalajara en 2011.

En todos los casos, fuera cual fuera el puesto ofertado, todos los candidatos tenían que estudiar el curso de geriatría. Junto con esta circunstancia, resultaba sospechoso que los cursos se realizaran en un salón parroquial de Albacete, tras haber abandonado un local de Balazote.

La persona encargada de captar a las “víctimas” presionaba a los candidatos, normalmente en situación de necesidad, para que se dieran prisa en apuntarse al curso porque estaba casi completo.

La policía calcula que alrededor de 100 personas han podido ser estafadas en esta trama.El botín conseguido por los tres detenidos asciende a 150 mil euros.

Gallardo