Fueron sorprendidos por la Policía Nacional que seguía a un sospechoso en una entrega. Hay otros cinco arrestados

Dos agentes de la Guardia Civil adscritos al puesto de Mos fueron detenidos ayer, mientras estaban de servicio en su coche patrulla, en una operación antidroga de la Policía Nacional en Vigo y su área. Los dos agentes no figuraban entre los objetivos directos, pero fueron sorprendidos en una entrega de estupefacientes en las proximidades de la gasolinera de Os Valos, entre Redondela y Mos, por los policías de la Unidad contra la Droga y el Crimen Organizado, Udyco. Los policías estaban al tanto de que iba a realizarse una entrega y seguían a un sospechoso, que también fue detenido.

Lo que al parecer no sabían es que los presuntos contactos de su sospechoso serían agentes de la Guardia Civil y vestidos de uniforme, si bien ya habían detectado que la red que investigaban desde hace meses parecía tener apoyo de algunos agentes. En el momento del arresto se intervino un kilo de droga -algunas versiones indican que era cocaína y otras heroína- y también el coche patrulla que se analizará por si en su interior hay restos de droga.

A lo largo de la jornada de ayer agentes antidroga de la Policía Nacional desplegaban un amplio operativo en Vigo y su área coordinado por la magistrada de Instrucción 3 de Vigo, Marisol López, en el que eran arrestadas al menos otras cinco personas, entre ellas un hijo del "rey de los gitanos", presunto cabecilla del clan desarticulado y cuyo chalé en el barrio de A Pedra en Tomiño fue registrado por la tarde. Dos furgones policiales, varios coches patrulla y funcionarios de paisano acompañaron a la comisión judicial, según explicaron vecinos de la zona.

La operación continúa abierta y no se descartan nuevos arrestos. Todos los detenidos permanecían anoche en los calabozos de la comisaría de Vigo a la espera de pasar a disposición judicial en las próximas horas.

El arresto de los dos guardias civiles causó sorpresa en el puesto de Mos, ya que uno de ellos es de los más antiguos destinados allí, y el otro le había acompañado de patrulla al parecer en sustitución de otro compañero. Ambos detenidos residen en el cuartel de Mos, y se espera que sus domicilios sean registrados por orden judicial en las próximas horas, para lo que ambos serán trasladados hasta allí con sus abogados.

A las 9.30 de la mañana una mujer alertaba al puesto de la Guardia Civil de Mos de que varios hombres armados encañonaban a dos agentes de patrulla y los "secuestraban", llevándose el coche policial y el de una tercera persona que estaba con ellos y que fue subida a la fuerza en un turismo.

Desde la unidad operativa de la Guardia Civil en Pontevedra se montó un dispositivo de urgencia para tratar de localizar a los guardias "secuestrados" y el coche patrulla, ya que al parecer la Policía Nacional no había comunicado a ningún mando de la Guardia Civil la detención. Sí lo hizo unos 25 minutos después al informar la Policía Nacional que había realizado los arrestos, lo que se comunicó a las unidades y se desmontó el operativo.

En esos veinticinco minutos, agentes de la Guardia Civil de todos los puestos salieron a la carretera en busca de los "secuestradores". Varios efectivos, con la pistola armada, bajaron del puesto de Mos a la gasolinera en busca de pistas que permitiesen resolver lo ocurrido. Algunos de ellos aseguraban que si en ese momento se hubieran cruzado con los policías de paisano, sin saber que lo eran, posiblemente habrían abierto fuego.

Farodevigo.es