Un vecino de Paterna, Vicente C. R., de 38 años de edad y con antecedentes policiales, ha sido condenado a pagar una multa de 320 euros por orinar sobre un coche patrulla de la Policía Local, fotografiar la irrespetuosa escena y colgarla sin tapujos en su perfil de Facebook.

Su osadía al hacer pública la imagen se convirtió en una prueba incontestable de una falta de respeto a los agentes de la autoridad, recogida en el artículo 634 del Código Penal. Tras el juicio correspondiente, el hombre fue multado por estos hechos y condenado también a pagar las costas procesales.

Vicente usó la imagen como perfil en la red social, y al hacerla pública, la foto fue descubierta el pasado mes de junio por un policía. El asunto acabó en el juzgado de instrucción número 5 de Paterna, y hace unos días, el 29 de octubre, se celebró un juicio de faltas, al que Vicente ni siquiera se presentó. La juez Eva Moreno le impuso una multa de 320 euros, y el procesado debe pagarla en 40 cuotas, y por cada dos sin abonar, le aplicarían un día de prisión.

Y lo más sorprendente es que Vicente debería estar muy agradecido a la Policía Local de Paterna. El mismo coche patrulla sobre el que orinó fue utilizado por dos policías locales para auxiliar a este hombre cuando intentó quitarse la vida con una ingesta de medicamentos en su domicilio. Los agentes trasladaron a Vicente en el vehículo policial al Hospital Arnau de Vilanova, donde le hicieron un lavado de estómago. Los policías también llevaron al servicio de urgencias los envoltorios de los medicamentos que el hombre se había tomado. Estos hechos ocurrieron en la madrugada del 6 de noviembre de 2012.

Y un año y medio después, el hombre orinó sobre el coche patrulla de la Policía Local de Paterna, que tenía las luces prioritarias encendidas, en una calle de la localidad mientras los agentes realizaban un servicio en las proximidades.