Tres conductores han sido sorprendidos con infracciones muy graves, que ponían en riesgo su propia seguridad y la del resto de usuarios de la vía.

La Guardia Civil de Tráfico, en el marco de las actuaciones diarias de prevención establecidas por el Subsector de Burgos en cuanto a seguridad vial se refiere, inspeccionaba en un control establecido en la A-1 la circulación de vehículos pesados.

En uno de los casos, el conductor carecía de la Licencia Comunitaria que habilita la conducción fuera de su país de origen y dentro de la Unión Europea, cuando se encontraba prestando transporte público internacional de mercancías. Esta infracción conlleva una sanción cuya cuantía se establece en 4.001 euros.

Otro de los vehículos controlados en ruta, llevaba en el momento de ser parado dos conductores, siendo su origen Francia y el destino Madrid. Éstos realizan las labores de conducción alternativamente, método autorizado que utilizan las empresas para cubrir largas distancias en el menor tiempo posible.

La inspección realizada por los especialistas en transporte de la Guardia Civil reveló la comisión de cinco infracciones muy graves. Mientras que a uno de los conductores le fue detectado tres infracciones por disminución en otras tantas ocasiones de su tiempo obligatorio de descanso, alargando por tanto la jornada de conducción con el riesgo que esta acción conlleva, el segundo no llevaba insertada en el tacógrafo la tarjeta del conductor correspondiente.

Adicionalmente éste fue denunciado al carecer de las hojas de registro donde figuran los tiempos de conducción y descanso de días precedentes conforme está reglamentado, lo que supone una sanción de 1.000 euros a sumar a la de 2.001 euros por no llevar inserta la tarjeta durante la conducción.

Además de la parte económica, este tipo de infracciones, que no son fáciles de detectar, conllevan la inmovilización temporal del vehículo, normalmente hasta que desaparezcan las causas que lo motivaron o se pongan los medios adecuados para poder continuar, por ejemplo la presencia de un segundo conductor habilitado.

Este tipo de prácticas, con reiteradas minoraciones en el descanso obligatorio con el fin de permanecer mayor tiempo al volante, influyen negativamente en los conductores; éstos acumulan un cansancio que incide en la distracción y ésta conlleva al accidente, normalmente con graves consecuencias, no sólo para el conductor infractor sino para el resto de usuarios de la vía, teniendo en cuenta el peso y dimensiones de este tipo de vehículos pesados.

Nuestra provincia es un lugar de paso habitual de este tipo de transportes pesados por carretera, con origen o destino a Europa. Este tipo de transporte internacional y normalmente de largo recorrido, es controlado diariamente por las Patrullas de Tráfico y por los Especialistas en Transporte de la Guardia Civil del Subsector de Burgos, con la misión final de poner fuera de la circulación, al menos temporalmente, este tipo de conductas arriesgadas y peligrosas y evitar la confección del correspondiente expediente sancionador.