Pavlina Pichlíková de 38 años, es una atractiva rubia conductora de camiones que vive en Beroun, en la región de Cerhovic, en la República Checa.

Aunque su apariencia es de ser una mujer frágil, ya que su peso es de 54 kg, mide 165 cm, pero esto no le impide desarrollar su trabajo a la perfección. Justamente nos cuenta, que su mayor satisfacción se cumple cuando se sienta al volante del camión y pone en marcha el motor de 480 caballos de potencia para mover 45 toneladas de un sitio a otro. Pavlina compagina dos de sus aficiones favoritas, el amor por los animales, los caballos y el motor.


Recuerda que la primera vez que se puso al volante, fue cuando ella tenía unos pocos años, en una concentración de camiones que se disputaba en una localidad próxima a su residencia, en la región de Zlín, donde " Ella solía ​​sentarse sobre su padre y manejar el volante" Hace dos años que cumplió un sueño que la acompañó desde la infancia, según cuenta, la primera vez que subió a un camión, todo le parecía enorme. Siempre quise viajar en camiones grandes.


Tiene la licencia de conducir desde hace dos años

Se hizo la licencia cuando conoció a su futuro marido, un camionero rumano que cuenta en este momento 36 años, y que conduce Scania, cuando tuvo muy claro que no sólo él iba a ser el amor de su vida, sino también el camión y el oficio de conducir camiones.

Pavlina también tiene una hija de 6 años, por lo que no siempre puede compaginar el trabajo de conductora de camiones con la de madre "Lo tomo como un hobby, voy tres veces a la semana de refuerzo con mi marido, ya que en la República Checa la vida es muy cara con unos costes excesivos.


Pavlina es la admiración de los conductores allá por donde va.

Los chicos del gremio, sienten admiración, pero principalmente sorpresa, cuando se encuentran frente a ella. "Más de una vez oí por la emisora como los chóferes - despotricaban sobre las mujeres, pero yo no les hago caso. Mi padre dice que estoy un poco loca, pero este trabajo es excitante. Pavlina afirmó que fue su madre la que decoró todo el interior de la cabina del camión en el que salen las estupendas fotos que ahora vais a ver.


Ella es sin duda la tercera generación de una familia que ha heredado el gusto por conducir camiones.


"Me gusta conducir por todos los lugares y carreteras de toda Europa y conocer sitios diferentes".


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