Durante la semana del 15 al 21 de febrero los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardía Civil, así como el resto de policías utonómicas y locales que se sumen a la campaña, controlarán furgonetas y todo tipo de camiones incidiendo en la vigilancia y control de la velocidad a la que circulan, las horas de conducción y descanso, el tacografo, el exceso de peso, los posibles defectos técnicos del vehículo o la seguridad de la carga transportada. También comprobarán que tanto la documentación del vehículo como la del conductor son correctas, que la conducción no se realiza bajo los efectos de drogas o alcohol, o que todos los ocupantes llevan abrochado el cinturón de seguridad.

Su accidentalidad

Camiones y furgonetas son el segundo tipo de automóvil más numeroso que circula por carretera. Representan el 16% del parque y sufren un 16% de los accidentes con víctimas. Según datos (contabilizados hasta las 24 horas tras producirse el accidente) de la DGT, en 2015 fallecieron en carretera 68 personas que viajaban en furgoneta y otras 59 que lo hacían en camiones. Cifra que se eleva a más de 500 si se contabilizan las víctimas registradas en vías urbanas e interurbanas, tomadas a 30 días y en todo tipo de vehículos implicados en accidentes con camiones o furgonetas. 

Estas son las claves de estos accidentes:

- Las vías convencionales siguen siendo las carreteras más peligrosas y en las que mueren más personas.

- La distracción es una de sus prinipales causas. El pasado año, este factor estuvo presente en uno de cada tres accidentes.

- Tres de cada diez de los fallecidos no hacian uso del cinturón de seguridad.

- Elevada antigüedad del parque actual de camiones y furgonetas, cuya media se sitúa en más de 12 años. Lo que supone un importante factor de riesgo, al carecer de los útlimos sistemas y equipamientos de seguridad, además de los problemas derivados del uso o falta de mantenimiento.