Un conductor reaccionó de manera violenta después de recibir una multa

Un hombre que embistió a un vehículo radar de la DGT que lo había interceptado con exceso de velocidad se enfrenta a una pena de cuatro años y cuatro meses de prisión.

La Fiscalía lo acusa de un delito de atentado y otro de lesiones, debido a que el agente de la Guardia Civil que estaba a cargo del dispositivo resultó gravemente herido. L.H.P.A. será juzgado próximamente en un juzgado de lo penal de Vigo.

Los hechos ocurrieron en la carretera PO 331 a la altura de la parroquia de Vincios, en el término municipal de Gondomar, el 7 de enero del año pasado. Sobre las seis de la tarde, el acusado circulaba con su vehículo marca Hyundai a 81 kilómetros por hora en una carretera con tratamiento de avenida urbana donde la velocidad está limitada a 50. Así lo constató un radar móvil colocado en la vía por la Guardia Civil.

Una patrulla paró al infractor unos metros más adelante y le impuso la correspondiente sanción administrativa.

Tras haber pagado la multa, el acusado se dirigió a bordo de su turismo al lugar donde se encontraba situado el vehículo camuflado de la DGT, de acuerdo con el escrito formulado por la acusación pública.

Cuando llegó al lugar, un agente de la Guardia Civil iniciaba la marcha en el vehículo radar al haber concluido ya el dispositivo de control de la velocidad en la zona. El acusado comenzó entonces a perseguir al agente y, cuando lo tuvo al alcance, lo golpeó con el frente de su vehículo en la parte posterior. Una vez que el vehículo policial se detuvo, el acusado volvió a golpearlo en la parte de atrás.

La víctima de este incidente solicitó refuerzos y unos minutos después, el conductor fue detenido.

A consecuencia de los impactos recibidos, el agente de la Guardia Civil, que tuvo que ser evacuado en ambulancia hasta un centro hospitalario, sufrió una cervialgia postraumática que le obligó a estar 109 días de baja. Por su parte, el vehículo policial también sufrió numerosos desperfectos.